He vivido
por encima de
mis posibilidades. Ahora
que las cosas
se han torcido
un poquito y
la economía Española
tiene algunas dificultades,
me lo han hecho ver
desde el Gobierno.
Menos mal que
mantienen la frialdad
y gestionan este
pozo con solvencia,
rapidez e imaginación.
Yo al principio
me negué a
aceptarlo, pero con
el tiempo y
a raíz de
ver que, más
gente, que también actuó
como yo, aceptaba
su culpabilidad, suicidándose,
asumí mi culpa.
Me daba un
poco de vergüenza seguir
con la farsa,
negando lo evidente,
máximo cuando había
personas muriendo. Hay
personas muriendo. Claro,
perdes todo y
te ves empezando
de cero, sin
las fuerzas ni
el empuje de
la juventud y
no te ves
capaz de hacerlo
nuevamente. Además te
queda la deuda
que hayas generado,
que deberás pagar,
como es lógico.
Compre un
apartamento en un
barrio de la
ciudad valiéndome de
una Hipoteca a
treinta y cinco
años. Usado, de
treinta años y
setenta y ocho
metros. Y también un
coche de nueve
años y casi doscientos mil
km. Para alquilar
pedían seis meses
de alquiler como depósito, que
no fueras sudaca
ni negro ni
tuvieras niños. Como
se imaginaran siendo
Uruguayo y con
una beba de
meses, no tenía
ninguna chance. No
fue fácil conseguir
un préstamo, ninguna
entidad Bancaria nos lo daba,
lo logro la
Inmobiliaria. ¿Dónde habríamos
vivido sino?
El coche me
era necesario para
ir a trabajar,
compre uno usado
para no meterme
en cuotas pagando
uno nuevo. Durante la
semana trabajaba en
la construcción y
los fines de
semana en una discoteca, generalmente
en la puerta.
Mari, mi
señora, también trabajaba
y trabaja. Supongo
que llevar parado
casi dos años
es parte del
castigo por ser
tan atrevido y
soñador. Porque claro,
si todos nos
atrevemos a soñar
con una vivienda
en propiedad y
un coche para
ir al trabajo,
mal vamos. Ni
hablar de pagarle
a nuestros hijos
estudios de un
idioma o que
hagan un deporte,
poder pagarles estudios
Universitarios, en el
futuro, es subversivo, lo sé ,lo sé.
Pido perdón a
todos los Españoles,
también a los
inmigrantes que no
lo son todavía y
a los que
nunca lo serán
pero viven dentro
de España. Especialmente
a la clase Política, lamento
profundamente haberles defraudado,
me siento muy
mal por los
perjuicios ocasionados. Entiendo
que quieran tomar
medidas legales, ejemplares,
si me encierran
y tiran la
llave lo entenderé perfectamente.
Si puede ser
en un centro
donde no esté
el Empalmado me sentiré
mas
comodo.
Sé que
no tengo derecho
a pedirles nada
pero debo hacerlo: no
permitan que mi
hija sueñe! Eviten
por cualquier medio
que acceda a
estudios superiores. Lo
ideal sería que
abandonara los estudios
y se quedara
embarazada con 16
años.
Me atreví
a soñar, viví
por encima de mis
posibilidades y hundí a
España, que desagradecido
he sido con la Madre
Patria que todo
me lo dio sin pedir
nada a cambio.
Perdónenme si
pueden.