Voy a jubilar mi cinturón.
Después de doce años le ha llegado el tiempo de reposar, lo
venia masticando y hoy tome la decisión. Esta deshilachado de forma despareja,
pero bastante avanzado en las puntas, lo que me ha llevado a tomar dicha
determinación. Le he ido cortando las hilachas, para mantenerlo lo más
presentable posible y podría apurar su uso, un tiempo más, pero no lo hare.
Hay que saber ver cuando algo debe ser retirado, en lo
posible antes de que alguien del entorno nos lo diga.
Como tiene muchos símbolos y dice mucho de quien lo lleva
puesto, es algo a tener en cuenta siempre. Porque si se debe atar de
determinada manera, las puntas deben quedar igualadas, de tal manera que nunca
se suelte, a menos que nosotros lo hagamos, mejor escurrido sobre la cintura
que alto y debemos llevarlo siempre puesto, entonces, no es un elemento más del
equipo, forma parte importante del Yudogui. Digamos que lo complementa dándole
sentido.
Yudogui: es como la RAE recomienda que lo escribamos,
recuerden que cedemos para vencer.
Para empezar esta el color del cinturón que representa los
conocimientos del Judoca. Sirve para atar la chaqueta y dejarla bien sujeta
para aguantar los tirones que se le darán practicando, a lo mejor esto debió ir
primero. Se le puede usar como un buen agarre, limitado en tiempo para los
competidores. En el suelo sirve para atar en algunas técnicas.
Las puntas igualadas representan equilibrio. Lleva su tiempo
de practica conseguir atar un cinturón y que ambas puntas tengas la misma
longitud. También podría estar demostrando determinación.
Se le usa en varios juegos y antiguamente doblado en cuatro,
para corregir algún mal comportamiento.
Con el tiempo, con solo ver como un yudoca se ata el
cinturón, sabemos de las ganas que le va a poner a la clase y a todo lo que
haga durante la misma.
Se dice que el cinturón, como está atado, representa al
espíritu del Yudoca.
Por todo esto y por algún otro motivo que seguro me he
dejado en el cursor (jejejejej, ya no hay tintero) voy a jubilar a mi cinturón.