Mama Osa tenía
tres cachorros, dos chicas y un
chico, muy traviesos. Cuando eran más
pequeños les hacia trepar alto a los arboles para poder ir sola a comer mucho y así tener leche siempre para amamantarles. Ahora que son
mas grandes los lleva a todos lados para enseñarles que se puede comer, donde
buscarlo, los mejores lugares para tumbarse al sol y descansar y también los
peligros que hay en el bosque.
Es muy divertido, tanto que suelen olvidarse de estar cerca
de mama y se alejan jugando o investigando olores, colores y a otros animalitos
que van descubriendo. Pero cuando mama Osa gruñe enfadada se apuran a volver cerca.
Hoy les lleva al rio, quiere que aprendan a pescar. Esta fría
el agua y los ositos remolonean sin decidirse a mojarse. Mama Osa atrapa un pez
enorme y lo saca a la orilla para que sus hijos coman, esta rico y rápido se lo
comen. Quieren más, pero Mama Osa les dice que ella no sacara mas pescado para
ellos, si quieren comer pescado deberán meterse en el agua y pescar.
¡Esta Fría! ¡No puedo, se escapan! ¡Que injusto, es muy difícil! Se quejaban los Ositos mientras Mama Osa comía
alegre pescado. Después de muchas horas mojadas, con hambre porque les faltaba práctica
siguieron a Mama Osa que les llevo a un claro del bosque para que se calentaran
al sol y descansaran. Cuando les vio recuperados les llevo a comer bayas, su
comida preferida; y tanto que olvidaron que no debían comer muchas porque les dolería
la barriga. Hicieron caca los tres ahí mismo, porque les dolía
mucho la barriga, y les reto Mama Osa por no irse a un lugar adecuado, alejado
de las bayas.
¡Que difícil se estaba haciendo todo! Pensaban los tres
Ositos, cada dia Mama nos exige más, y somos muy jóvenes. Al mismo tiempo Mama
Osa les miraba orgullosa, eran chiquitos pero aprendían rápido.
Caía la tarde lentamente, había que ir buscando un lugar para
pasar la noche cuando un sonido nuevo altero a Mama Osa: Ladridos. ¡Si hay
perros hay Cazadores! Sabía que estaban cansados pero les pidió que la
siguieran apretando el paso, subieron hasta lo más alto de la montaña y
cruzaron al otro lado poniéndose a salvo.
Colorín Colorado este cuento se ha acabado.
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