Dependerá de la magnitud de la misma, sin ninguna
duda. Y de donde te agarre, no es lo mismo afuera que en un refugio. Pero
aunque te salves puede que ya no te queden bienes materiales o te queden pocos
¿Y si la tormenta fuera de otro tipo? Digamos
existencial. El problema ahora es
que no tenes refugio donde ampararte para sobrellevarla, estas a la intemperie
si o si, o sea que te mojaras y tiritaras fijo.
Alguien me quiere convencer de que son necesarias,
incluso hasta benignas, le he remitido a los damnificados haber que opinan. Por
no mandarle a la mierda que es lo que quería hacer, se aprende con los años a
ser un poco más reflexivo y tener más ironía, recurrir menos al insulto como
terapia. En fin, que para esta persona muy allegada las tormentas son algo que
tiene que pasar para hacernos reflexionar y probablemente encarar los cambios
que eran necesarios en nuestras vidas, que de otra manera no habríamos hecho.
Sigo sin verlo así, una tormenta del tipo que seas
es eso: una tormenta. Te afecta más o menos, incluso te mata junto con un
montón de personas, dependiendo de que tanto te quite. Si es la vida te lo ha
quitado todo, sin remedio.
Pero puede ser que no mueras pero quedes con muchas
dudas, sobre ti mismo y tus capacidades, que te atenazan, te constriñen, te
llevan al quietismo.
Cuando pasa la tormenta solo quedan escombros de lo
que fue tu vida. Lo otro no fueron tormentas fueron alguna otra cosa, tormenta
es la que te deja titiritando y rodeado de escombros, esa si es una tormenta.