martes, 28 de octubre de 2014

Fuerza.


En  esta  vuelta  u  oportunidad,  voy  a  escribir  de  un  símbolo  de  quienes  hacemos  Judo,  el  que  nos  legara  Jigoro  Kano.  La  Fuerza.  Pero  no  la  fuerza  meramente  física,  que  también  se  necesita,  no,  yo  me  refiero  a  una  mezcla  de  cosas,  que  llamo  Fuerza  y  nos  hace  levantarnos,  por  dura  que  haya  sido  la  caída  o  por  llevar  muchas  y  costarnos,  girarnos,  hemos  quedado  boca  arriba  en  la  mayoría  de  los  casos,  si  estamos  de  costado  o   boca  abajo,  no  cambia  mucho;  hay  una  manera  correcta  de  hacerlo,  y  quien  la  sabe  la  hace,  quien  no,  no  hace  más  que  levantarse  de  cualquier  manera.  Y  hay  que  levantarse  rápido,  muy  rápido,  a  toda  velocidad,  preparado  para  seguir  lo  que  se  esté  haciendo.  Él  Judogui,  se  arregla  a  la  carrera,  se  pone  bien,  en  los  descansos,  antes  de  tomar  agua  o  de  hacer  cualquier  otra  cosa  y  el  cinturón  de  un  Judoka,  ¡Jamás!  Se  suelta  y  cae  al  suelo  cual  pájaro  muerto.  Antes  cae  desmayado  su  portador,  ¿Por qué?  Hay  un  lindo  motivo,  profundo,  que  no  desvelare,  los  que  hacen  Judo,  pueden  averiguarlo,  si  quieren;  los  que  hacen  Judo  de  Jigoro  Kano,  lo  aprenderán con seguridad.                                      Fuerza  es  llegar  puntual,  5  minutos  antes;  con  las  uñas  cortas  y  habiéndose  duchado,  antes  de ponerse  el  Judogui.  Fuerza  es  no  faltar  a  clase,  salvo  fuerza  mayor:  deceso  de  familiar,  enfermedad  seria,  tirando  a  grave  y  lesión  que  impida,  entrenar.  Por  trabajo  o  estudios,  también  se  puede  faltar.  Fuerza  para  ser  benévolo,  con  el  débil,  el  chico,  el  que  sabe  menos  o  quien  ya  tiene  mucho  almanaque  encima;  Fuerza  para  buscar  a  los  grandes,  fuertes,  técnicos  y  que  te  hacen  de  goma  y  hacerlo  con  ganas,  predisposición  y  entendiendo  el  privilegio. Fuerza  para  ser  constante,  metódico,  obediente,  disciplinado  e  invertir  tiempo  en  tu  formación,  como  ser  humano;  cualquiera  da  una  trompada  o  una  patada,  nosotros  nos  guardamos  lo  que  sabemos  y  nos  vamos  a  casa,  si  podemos  y  nos  dejan.  Tenemos  una  técnica  especial,  pulida,  trabajada  hasta  la  extenuación,  es  un  arma  poderosa  y  eficaz  y  siempre  preferimos  no  mostrarla,  no  usarla,  conscientes  de  las  heridas  que  podemos  causar,  si  lo  hiciéramos  o  si  todavía no  lo  somos,  adiestrados  en  el  Dojo,  por  nuestro  Sensei,  a  que  no  se  usa  nada  de  lo  aprendido  sobre  el  tatami,  fuera  de  este. Podría  llamarle  Espíritu,  perfectamente,  pero  resulta  un  tanto  etéreo  y  siempre  fui  más  de  la  contundencia,  por  eso  me  cuesta  tanto  aprender  las  enseñanzas  de  Jigoro  Kano  y  sus  sutilezas. Fuerza  para  perseguir  tus  limites  físicos,  mentales  y  espirituales;  para  ser  cada  día  más  fuerte  y  por  lo  tanto,  cada  día  más  Educado,  Cortes,  Respetuoso  y  Considerado  con  el  prójimo;  ser  fuerte  no  te  da  derecho  a  ser  un  imbécil,  prepotente  y  nosotros  no  somos  así,  es  la  antítesis  de  lo  que  queremos  ser.  Nosotros,  cuidado,  los  que  sabemos  quién  es  Jigoro  Kano,  pero  no  solo  que  era  Japonés,  sabemos  algunas  cosas más. Fuerza  la  que  nos  da,  sabernos  capaces  de  repeler  una  agresión  y  con  eficacia,  tan  cuestionada en  muchas  ocasiones.  El  Judo  es  Fuerza  y  es  mucho más.                   
Cuando  te  ves  frente  a  un  grupo  de  niños  y  lo  primero  que  te  propones  mejorar,  es  el  saludo  colectivo,  ves  que  hay  que  trabajar,  les  cuesta,  pero  ellos,  ven,  que  no  vas  a  darte  por  vencido  y  cuando  van  ganando  armonía  y  aquello  se  parece  a  un  saludo  en  condiciones,  se  motivan  y  la  mejoría  es  rápida.  La  Fuerza  es  convicción,  si  mis  compañeros  y  los  compañeros  del  Sensei,  podían,  ¿Por qué  no  podremos  nosotros?  En  tres  meses  y  algo,  es  un  saludo  que  envidian  muchos  y  querrían  para  sus  alumnos,  nadie  los  ve,  sus  padres  y  madres,  mi  Sensei;  no  lo  hice  para  dar  envidia,  lo  hice  para  demostrarles  que  trabajando  juntos,  progresaríamos.  Fuerza,  muy  necesaria  para  afrontar  los  obstáculos  y  progresar,  todos,  colectivamente,  no  hay  Judo,  no  quiero  ser  pesado,  pero  el  de  Jigoro  Kano;  sin  un  grupo,  un  Judoka,  lo  es,  en  función  de  un grupo. La  Fuerza  es  el  grupo,  como  no.  Aunque  se puede  hacer  Judo  solo,  técnico  y  de  otros  aspectos.  Fuerza  es  también:   trabajo,  superación  sacrificio,  risas,  inteligencia  estrategia,  táctica,  decisiones,  asumir  riesgos,  madurar,  flexibilidad  y  no  solo  física,  coraje,  valores,  protocolos;  hacerlo  bien  a  pesar  de  que  no  te  miren  ni  vayan  a  saberlo;  la  Fuerza  al  ser  un  componente  del  Judo,  se  parece  a  este  resulta difícil  de definir correcta y adecuadamente. Lo que  más  grafica,  muestra,  a  la  Fuerza,  es  ver  a  un  Judoka  levantarse,  cuando  la  clase  está  por  terminar  y  cada  caída,  pesa  como  una  losa,  ninguno  se  queda  tirado,  arriba  y  a  seguir;  eso  requiere  mucha  Fuerza.  Como  la  Vida,  ni  más  ni  menos.

martes, 21 de octubre de 2014

No hay árbitros.


No hay árbitros, escucho a cada rato y lo veo cuando voy a un campeonato. No, claro que no hay; para formar un arbitro necesitas un Judoka y de excelente nivel técnico. ¿Y para formar Judokas? Buena pregunta, fea, dolorosa, incomoda e inadecuada. Las Federaciones, los Federativos, las Comisiones, los intereses, la ignorancia o no observancia de las reglas o manera adecuada de hacer las cosas, no por ser modernos, las haremos mejor, olvidar las bases, solo condujeron a esta realidad: no hay árbitros. Y si comparas a uno de 60 años o cerca, con uno de 25, ves que la diferencia a favor del de 60 años, es abismal, claro, sabe mucho Judo y en su día, compitió mucho. Competir es requisito, no el único; el principal, es saber mucho Judo, mucho, mucho y saber mucho Judo, no es fácil ni se consigue pagando un examen al que podes ni siquiera ir, pero te aprobaran igualmente. También ayuda conocer el Reglamento, jejejejejej, si, saberlo contribuye a ser arbitro, uno bueno. Cuando los genios que nos mandan, algunos no saben Judo, ese que desarrollo Jigoro Kano, creo que han practicado otros estilos de arquitectura financiera, pero dudo que hicieran Judo, toman ciertas decisiones, me pregunto que opinaría Jigoro Kano, que diría. Algunos son Campeones, varias veces y eso parece ser lo único que importa; como si serlo 11 veces te habiliten a llevar una pulserita en un tobillo, cuando llevas el Judogui. La excusa de que no podes sacarla, se licua frente a mi corta uñas, que siempre va en la mochila, con las gomitas para mis compañeras y el esparadrapo ancho. ¿Como van a existir árbitros? ¿Como van a ser imparciales en Girona? Donde sufrí en mis carnes, la ineptitud disfrazada de arbitro, lo de menos, fue el resultado del combate, que por supuesto perdí por mi culpa, si hubiera matado o lesionado gravemente a mi adversario, locatario, habría ganado, pero no se trata de ganar, se trata de, como ganas y de como perdés y eso me lo decía Sensei Firpo y le imagine con Sensei Erlich, mirándome serios, con el mensaje diáfano: ni siquiera lo consideres, a buscar otro Ippon, moralmente, ya ganaste. Y eso es Judo de verdad, hacer a alguien que lo practica mejor, para si mismo y para los demás, aunque deba usar un recurso imaginario y traer a sus Senseis a que le frenen, me sobraban ganas, experiencia y técnica para ganar y ganar, con ese arbitro, era lastimar seriamente a mi adversario o matarlo, inadmisible hasta para mi. Mi adversario, me busco y se disculpo avergonzado, sufrió cuatro técnicas decisivas, los dos sabíamos que habían sido Ippones, pero no el arbitro, que era de su gimnasio, eso no podía ser un Dojo. No hay árbitros ni los habrá, no busquen, como los Judokas, se extinguen rápidamente; tenemos autoridades muy sabias, porque se creen sabias, gente que no sabe Judo, juzgando Judokas porque creen saber de que hablan y opinan. Hoy, cualquiera opina, incluso yo, la diferencia radica, en que se muy bien, todo lo que no se; no ignoro ninguno de mis grandes defectos, no me pagan por venderme y soy libre de decir que pienso y siento y ojo, me contengo, hago Judo por Jigoro Kano.

lunes, 20 de octubre de 2014

Efectividad dos.


Escribo y cuelgo efectividad, porque así, lo sentía y siento, ni más ni menos; como cualquier otro, algunos no los pongo porque soy demasiado honesto y duro y de eso, se aguanta poco y disparan a ver si pueden demandarme, hablan hasta con los abogados, increíble. Efectividad, estábamos en ese articulo y en esa cuestión. Parado, a la salida de la escuela de mi nena, que esa tarde, antes de ayer, tenía que salir con una amiguita y se venían las dos conmigo, a casa, merendaban y las llevaba a Ingles. Las instrucciones estaban claras, como metiera la gamba, habría tormenta. Yo no veía a la mía ni a la prestada, me distraje hablando con una madre y con una amiga y estaba medio pendiente por la izquierda, de que aparecieran las chancletas, la derecha, no estaba controlada, en ese entorno, no era probable, sufrir un ataque y no sufrí un ataque, simplemente Juan, un amigo, un Budoka, intento agarrarme el cuello, como para estrangularme. Su mano quedo clavada entre mi hombro y mi mandíbula, con mi mano izquierda, de saque su mano derecha, la que atacaba y con la derecha le marche un agarron de huevos y rompimos a reír, ante el estupor general de los demás padres y madres, que deben creer que estamos los dos muy locos o que igual nos drogamos. Solo disfrutábamos, solo disfrutábamos de sentirnos diferentes, tanto como para intentar sorprender a un amigo, hasta cuando trata de ubicar a su hija y la amiguita, que por ahí no andaban.

-No entrenaste nada en tu vida, cabronazo, ni metí la mano, cerraste con fuerza y ni siquiera te moviste, sabias que era alguien amigo.-

-Para un Judoka el cuello es importante e inviolable, he trabajado eso, muchos años. No percibí agresividad, era alguien jugando.-

-Pero aún así defendiste perfectamente.-

-Claro, otra oportunidad, de ver si soy o no efectivo. Efectividad defendiendo, tan importante como la otra, no siempre llevaras la iniciativa, ni el otro sera bobalicón.-

-Nosotros no trabajamos el cuello.-

-Bueno, trabajan otras cosas, ¿que más da?-

-Que no se, si soy así de efectivo.-

-¡Mi hija! Y me falta la amiga, te dejo loco, mi mujer me mata. Luna, Luna, ¿donde esta tu amiga?-

Andaba ahí nomas, merendaron y llegaron a Ingles sin problemas, zafe de la bronca.

Fue automático, sentí que entraban unos dedos, contraje los músculos del cuello, subí el hombro derecho, el lado del ataque y baje la mandíbula y el mentón, cerrando cualquier posibilidad de que por ahí, me metieran la mano o el brazo. ¿Entrenado así, por si pasa exactamente así? No, nunca, basta hacer combate en el suelo y trabajar con los compañeros que tienen facilidad para estrangularte, con el tiempo, aprendes a cerrar y defender el cuello. Hay que trabajar duro y años, claro, regalado en estas cuestiones no hay nada.  Efectividad, fue como premonitorio. Y Creación, Arte, desde algo conocido, llegar a algo que no lo es o no lo era y conseguir, protegerte, evolucionando desde las técnicas que trabajamos por sistema, hacia otras, pura fantasía, puro disfrute e igualmente, efectivas. Judo, hablo de algo difícil de explicar, porque mucho de lo que le compone es sensaciones, y son propias. Que solo afloran si entrenas duramente, olvidando medallas, árbitros, cinturones u otras cuestiones, que no son las importantes. Llegas al punto, complicado, en el que, hasta tus uñas se rompen solas o casi, tus músculos no dan nada de si, hay dolores reflejos y viejos dolores de lesiones; vas a ver al Sensei, le contás como esta la situación y entre los dos acuerdan que iras, harás lo que buenamente puedas, porque en ese tatami, tenes un lugar, tenes un lugar... Efectividad a nivel humano. El Judo, ese que Jigoro Kano desarrollo, tiene tanto que enseñar, tanto para enseñarme, sobre tantos aspectos, tan dispares y diversos, tanto que enseñarme sobre mi mismo y sobre ustedes, mis congéneres, mis iguales.

viernes, 17 de octubre de 2014

Efectividad.

Efectividad:   Hace muchos años, me puse preguntar: ¿Y si? ¿Y si? Esto o aquello, o lo de más allá. Termine por hartar al Sensei, que me miro serio, me dijo que me dejara de joder, que entrenara, que me olvidara de nada más, que de entrenar. Que no importaban los árbitros, si yo hacia Ippones, seguramente, no importarían los errores arbitrales, cometidos por error humano o de pura mala leche, que ya empezaba a dejarce ver y no supieron cortar de raíz, no supimos. Ta, campeonatos clarito, y ¿arafue? Porque afuera del tatami, yo no veo que esto funcione o vaya a funcionar, eso de correr, esta genial, corro que me las pelo y ¿el día que no pueda correr, que hago? Ya saben o se los cuento ahora, que en ese entonces, mi Sensei, Luis Ángel Firpo, era, mi padre, esas casualidades de la vida, que en otras latitudes, no es tan extraño, por cierto. Me miro de costado, decidiendo que, como, donde, me desvelaría parte de cierta verdad, que suele olvidarce y algunos ignoran por completo. Me puso a trabajar, después hablábamos, seguí entrando y entrando y entrando, pero con poco cerebro, desperdiciaba mi tiempo, no hacia caso, así es difícil, pero es un proceso que hay que pasar, una etapa. Me acompañaba a tomar el ómnibus, no habia un alma en la Aduana Montevideana, alguna prostituta vieja y ajada y proxenetas, gatos y oscuridad. Deja la mochila, ordeno. No hay tatami, cualquier técnica que hagas y le caigas a tu enemigo encima, enemigo, no adversario, le mataras. O se desnucara, o le romperás la columna tirándolo contra ese banco. Me levanto sobre sus hombros y entendí, claro que entendí, no habia caída valida, si tu columna impactaba contra la jardinera, el banco o la caja de la camioneta, se rompe y punto. No te enseño nada más, te faltan años, pero cada cosa que haces en la clase, puede ser muy peligrosa, usada afuera, dijo. Mi cerebro corría para seguirle, lo que acababa de ver, superaba con mucho, cualquier idea previa, era efectivo a un nivel peligroso. Me bajo los humos. Los cuchillos, los palos y las armas de fuego, requieren mucho entrenamiento y no lo tenes, pero cada clase, repito, haces lo que deberías hacer para defenderte acá, en la calle. Cada clase, cada entrada, cada repetición, es lo que usaras, tal cual, es muy efectivo Rafa, solo que lo disimulamos. El cuello de alguien que no hace Judo, excepto luchadores, boxeo o  rugby, es de pajarito, es punto débil y ventaja nuestra; levantar a alguien no acostumbrado, les da pánico. Y deja de hacer esas preguntas en clase, tus compañeros no están cerca de planteárselo. Ese es tu ómnibus, no me uses nada, nada afuera; solo si no hay más remedio, entonces, cuida a los malos. Para cuando me sacaron navajas, puntas de botella y empuñaron una pistola, sin terminar de sacarla del cinturón; él me habia enseñado ciertas cositas, que no son de Judo, del de Jigoro Kano, son o eran del Gaucho y para parar un filo, son crema; para lo demás, Judo de Jigoro Kano, con facilidad pasmosa, control y cabeza fría. Efectividad, me dijeron hoy y me reí, si no se entrena duro, no hay efectividad posible. Que el Judo no era efectivo y les di la razón, lo que llaman Judo, es flojito, el otro, el de trabajar duro, que nos regalo Jigoro Kano, ese, guambia, ese regala efectividad.

viernes, 10 de octubre de 2014

¡Animo Teresa!


En  Teresa,  en  la  persona  que  trituramos  con  saña,  por  distintas  razones,  ninguna  edificante.  No  creo  que  te  hayas  equivocado,  no  creo  que  cometieras  ningún  error,  te  jugabas  la  vida  al  hacerlo;  simplemente  te  habían  abandonado  tus  superiores,  antes  de  que  pasara  nada  y  ahora,  también  nosotros,  en  nuestra  ignorancia  y  miedo. Tanto  si  sabían  lo  que  hacían,  como  si  lo  ignoraban  y  puede  que  sean  ambas;  han  demostrado  y  demuestran  poca  preparación  o  ninguna,  para  afrontar  asuntos  que  son  peligrosos,  no  potencialmente  peligrosos,  directamente  peligrosos.  Y  ahora  vos  estas  enferma,  el  virus  te  infecta  y  parece  que  la  culpa  es  tuya.  La  culpa  es  nuestra,  de  todos  nosotros  por  no  haber  sabido  elegir  mejor  a  nuestros  gobernantes,  ni  construir  una  sociedad  mejor,  a  todos  los  niveles,  en  ningún  caso  tuyo,  que  cumplías  con  tu  trabajo,  poniendo  en  riesgo  tu  vida  y  sabiéndolo,  lo  que no  te  hace  menos  valiente.  Ni  a  tus  compañeras  y  compañeros,  que  cada  día  trabajan  aliviando  el  dolor  ajeno,  cuidando  a  quienes  lo  necesitan,  con  una  cuota  de  humanidad,  que  todos  deberíamos  tener.                                                                                    Victima  de  tus  Jefes,  de  nuestra  Ministra  y  nuestro  Gobierno;  de  la  incapacidad  manifiesta  de hacer  nada  a  derechas,  crean  ellos  lo  que  crean.  Lamento  Teresa  que  afrontes  esto  casi  sola,  de  corazón;  deseo  que  le  ganes  al  Ebola  y  sigas  adelante  a  pesar  de  mentiras  y  engaños.  Deseo  que  puedas  y  quieras,  seguir  poniéndote  la  bata  y  trabajar  para  quienes  en  sus  camillas,  esperan  ansiosos  tu  sonrisa,  ese  reproche  si  no  fueron  al  baño  o  no  se  comieron  todo  lo  de  la  bandeja,  ese  ánimo  cuando  toca  hacer  algo  doloroso,  pero  hay que  hacerlo.  Tu  alegría  cuando  me  ves  abandonar  la  planta,  tu dolor  cuando  no  lo  consigo.  Sos  más  necesaria  que  todos  los  que  te  deberían  cuidar  y  no  saben  hacer  su  trabajo  o  no  quieren  hacerlo  bien  o  se vendieron.                                   ¡Animo  Teresa!

miércoles, 8 de octubre de 2014

¿Donde esta el Presidente?


Señor Rajoy. Hace nada salió en los medios de comunicación, manifestando que traer a España, a sendos seres humanos infectados del virus del Ebola, era lo que tenia o debía hacer. Lo dijo convencido o aparentando convencimiento, no lo sé y me importa poco. Lo que usted y su gobierno debieron hacer, en todo caso, era enviar gente preparada, presumiblemente militares, con los medios adecuados, para atender en las cercanías del lugar en el que se encontraban, a esas dos personas, que los expertos daban pocas posibilidades de supervivencia. Por el contrario, les trajo a territorio Español, asumiendo el riesgo, de que por cualquier fatalidad, llámese falta de preparación, llámese Tercera Planta del Hospital Carlos Tercero desmantelada, llámese cursos de 15 minutos y de 40 minutos, impartidos al personal, llámese falta de personal o simple fatalidad Mariano, la maldita fatalidad; asumiendo el riesgo de ponernos a todos en riesgo; a los Españoles, a los Europeos y al Mundo entero. Francamente, me parece que usted es un ignorante en la materia, exactamente como yo y que sus asesores, incluyendo a la Ministra, ocupan un cargo que les queda ancho, largo y les pesa en los hombros. Pero el único responsable es usted, que salió y lo dijo clarito; Es lo que tengo o debo hacer. Creo que dijo tengo, no voy a perder el tiempo buscándolo. Deber es otra cosa, Mariano, DEBER, es lo que uno hace porque asumió un compromiso, búsquelo en la RAE, pero que usted obvio: ”El deber de velar por el bienestar de la mayoría, anteponer a la mayoría y protegerla del virus del Ebola y de usted mismo.” Difícil situación, para eso le elegimos, Señor Presidente, para eso le pagamos, para que Gobierne; no digo dejarles morir, sin auxiliarles, digo arriesgar la vida de un contingente militar, preparado para situación de guerra BIOLOGICA y que por sentido del DEBER, Mariano, por estricto sentido del DEBER, habrían cuidado del o de los enfermos. Cumplida la misión, habría sido fácil, pasar la cuarentena, creo que de 21 días mínimo, muy aburrida, sin dudas, lejos de casa y las familias, lejos de la tierra que aman, pero podríamos, haberles hecho un video por día, cada uno de nosotros, agradeciéndoles, que cumplieran con su DEBER y al hacerlo, nos protegieran y cuidaran. No necesitan más, con saber que en casa entendemos los sacrificios que hacen, aquellos que no somos familia ni vestimos uniforme y que solemos olvidar que la vida del soldado, no es agradable ni de maniobras. Y tendrían una familia al volver, una tierra, un país, un lugar al cual volver, todo lo que usted, ha puesto en peligro, irresponsablemente, y a las pruebas me remito, una enfermera, que sepamos y su perro, no lo sabemos todavía, infectados del virus del Ebola, como consecuencia de una nefasta decisión suya. ¿Dígame, si le resulta tan difícil gobernar, como es que creyó que podría hacerlo? Aún nos queda tiempo para soportarnos Mariano y para que sigas cometiendo errores de bulto, de juicio, confundiendo tener con DEBER; confundiendo la mayoría, andamos por los 46 millones en España, pero súmale la UE y el Mundo, te plantas en miles de millones, no todos morirían, unos cuantos sí y pasarías a la Historia, si queda Historia, después de esta; como Mariano el del Ebola; con dos personas, en riesgo evidente de muerte, pero que solo, son dos personas. Mariano mentiste, mentís y nos mentiras, en diversos asuntos, todos de profundo calado, pero en el tema del Virus del Ebola, jugaste con la vida de todos nosotros, con un desparpajo e irresponsabilidad, asombrosos; mintiéndonos al decirnos que todo estaba bajo control y sabiendo que no era así. Hoy no te asomaste para nada, escondido en tu guarida, esperabas y esperas, un rayo al que agarrarte, encontrar, a quien culpar de los hechos y salir impoluto de los mismos. Cuando tu equipo, lo tenga, saldrás; ojala, esto no deje de ser un susto, la enfermera se cure, su perro se salve y no haya más infectados. Poco a poco vamos viendo a qué atenernos contigo Mariano y no es nada bueno, en absoluto. Ojala te contagies del Virus del Ebola, Mariano, y si puede ser, la Ministra y alguno más de los que se dedican a tomarnos el pelo, seguro que no te parecía tan buen a idea, entonces; arriesgarnos a todos, sabiendo, como sabias, que no teníamos como hacerlo adecuadamente y si no lo sabías, deberías irte a vivir a un tempano de hielo, sobras.

jueves, 2 de octubre de 2014

¡Gracias PAH de Horta Sud, Valencia!


Hay  cosas  lamentables  y  la  actuación del  gobierno,  en  lo  referente  a  la  actividad  presuntamente  ilícita  de  los  bancos,   en  lo  referido  a  las  hipotecas,  su  cálculo  y  la  resolución  de  los  casos  de  quienes  no  pueden  hacer  frente  a  las  cuotas,  lo  es.  Muy  lamentable  y  demuestra  lo  alejados  que  están  los  gobernantes  de  sus  gobernados,  lo  poquito  que  importa  proteger  a  los  más  débiles  y  velar  por  hacer  cumplir  los  derechos,  establecidos  en  la  Constitución. O  simplemente,  hacer  cumplir  la  ley,  a  los  bancos,  si,  si,  a  los  bancos.  No  me  voy  a  extender,  valga  decir  que  el  banco  se  quedo  mi  casa,  que  de  un  plumazo,  algo  así  como  72000  euros,  deje  de  deberlos,  lo  que esta  tazada  la  casa  y  otro  tanto,  se  volatilizo,  como  arte  de  magia.  Esta,  no  está,  lo  debes,  ya  no  lo  debes.  Magia  financiera,  seguramente.  Perdí  mi,  nuestra  casa,  ahora  me  la  alquilan  con  un  contrato  social,  bastante  por  debajo  de  la  cuota,  muy  abajo;  y  la  perdí  por  no  poder  pagar  y  resulta  que  no  podía  hacerlo  por  estar  el  matrimonio  en  el  paro  y  porque  el  cálculo  de  la  cuota  era  ilegal  y  abusivo,  Bruselas  dixit,  y  de  haberlo  hecho,  con  arreglo  a  la  ley,  probablemente,  habría  podido  pagar  la  cuota,  eso  no  lo  sé,   pero  Rajoy  no  tiene  tiempo,  ni  ganas  de  llamar  al  orden  a  los  bancos.  Ni  él,  ni  ninguno  de  sus  presuntos  Ministros,  llamarles  Ministros  es  ser  generoso.  Solo  nos  ayudaron  las  Plataformas  Anti  Hipoteca,  únicamente  ellos  asesoraron,  guiaron  y  contuvieron  a  mi  esposa  en  esta  guerra  ganada  al  banco.  Perdimos  la  casa,  cierto,  no  nos  quedamos  con  casi  150000  euros  de  deuda  y  ahora  pagamos,  por  vivir  en  la  misma  casa,  unos  530  euros  menos  al  mes. Se  puede  ganarle  a  los  bancos  y  las  PAH,  lo  hacen  cada  día,  mientras,  el  presunto  Presidente  y  sus  presuntos  Ministros  tocan  el  arpa,  viajan  en  coches  oficiales,  no  pagan  el  café  que  se  toman,  la  comida  es  subvencionada  y  se  dedican  a  presuntamente,  cuidado,  cuidado,  acá  robas  1025  millones  de  euros  y  no  se  puede  decir  que  sos  una  ladrona;  en  este  país,  sos  político  35  años,  al  5 %   de  comisión  directa,  algo  que  Al  Capone,  Jhon  Gotti.  Albert  Anastasia  deben  envidiarle  o  le  hubiesen  envidiado,   y  nadie  se  percata  y  cuando,  una ex nuera  destapa  la  olla,  no  pasa  nada,   es todo  presuntamente. ¿Honor? Solo  entre  presuntos  ladrones  y  no  estoy  seguro.   La  buena  noticia  es  que  las  PAH  si  pueden  ganarle  a  los  bancos,  lo  hacen  cada  día,  lleva  tiempo,  paciencia  y  coraje,  porque  encima  te  destratan  los  trabajadores  bancarios,  si,   muy  puestos  en  que  somos  delincuentes  por  no  pagar;  indiferencia  y  a  luchar,  unidos,  juntándonos  con  quienes  pueden  darnos  una  mano  y  lo  hacen.  Gracias  a  esas  personas  anónimas,  que  trabajan  por  sus  semejantes,  completamente  gratis;  gracias  por  ayudarnos,  gracias  por  permitirnos  seguir  en  nuestro  hogar,  aunque  ya  no  sea  el  sueño  que  supo  ser.  No  es  culpa  nuestra,  ni  la  crisis,  ni  que  los  bancos  sean  presuntamente  fraudulentos  y  presuntamente  nos  estafen  y  roben;  ni  tampoco  que  el  señor  Rajoy  no  se  atreva  con  los  bancos,  ni  sus   presuntos Ministros.  Presidente:  mi  esposa  le  gano  a  un  banco,  apoyada  por  un  grupito  de  gente,  ¿Qué  no  podría  hacer  usted,  si  supiera  cómo?  Porque  creo  que  aunque  presuntamente  quisiera,  usted  presuntamente  es  un  verdadero  asno,  como  sus  presuntos  Ministros  e  ignora  como  hacer  para  empezar  a  paliar  la  crisis.  Haría  bien  en  dimitir  y  ellos  también,  no  valen  una  moneda  de  aleación  barata.