miércoles, 29 de febrero de 2012

Leonel y el palo.


Mi hermano pequeño estuvo practicando un tiempo Sipalkido, como quería aprender a usar el Bo, palo de unos cuatro o cinco centímetros de diámetro y un largo de metro veinte, el Profesor le dijo que construyera uno y lo llevara a clase. Mi hermano pidió en una carpintería que se lo hicieran y fue con él a la clase. El Profesor le explico la manera correcta de llevarlo por la calle, que no debía jugar y que si le veía hacerlo no le enseñaría. La manera de llevarlo era agarrándolo con una mano y pegándolo a la cadera con el extremo superior asomando apenas por encima del hombro.

El profesor le dijo que ahora que tenía un Bo y que sabia como transportarlo le observaría un tiempo para ver si de verdad quería aprender a usarlo y si cumplía las reglas. Porque en cuanto no lo hiciese podía olvidarse de que le enseñara.

Leo iba y venía por el barrio a entrenar y luego a casa y los muchachos del barrio se burlaban al verle pasar. Situación de lo más típica que se mantuvo durante meses. Pero una noche especialmente aburrida decidieron que le darían un susto. Unos ocho ociosos muchachos se emboscaron en una zona especialmente oscura y atacaron a Leonel cuando llego a su altura. En un santiamén empezó a repartir palazos y patadas a velocidad de vértigo.

El resultado de la emboscada fueron ocho muchachos magullados y un Bo roto. Durante un tiempo consideraron vengarse pero impero la cordura y decidieron dejarlo en paz. Ya podían estar aburridos que no idearon mas emboscadas.

lunes, 27 de febrero de 2012

Gabi.


Estas solo y te sentís peor que eso, que ya es sentirse. Te preguntas cómos y porqués, buscas culpables y responsables. Porque te encantaría poder culpar o responsabilizar a otros de tu situación, cualquier cosa menos admitir que te metiste solito, que en aquellos tiempos lejanos de tu juventud en la que te creías inmortal y que lo negativo nunca te salpicaría; no te asomaste al futuro ni escuchaste a quienes te previnieron contra el mismo. Eras un caballo desbocado sin un rumbo fijo pero viviendo a toda velocidad, encandilado por esta no quisiste ver, tampoco saber. Cerraste los ojos y te dejaste llevar, ciego y sordo a todo lo que no fuera la búsqueda de un escape a esa realidad tan cruel, tan parecida a la de tantos.

No eras mal tipo, sigues sin serlo, pero ahora estas muy deteriorado, muy enfermo. En el fondo sabes que te metiste porque quisiste, que hay cosas que podrían explicarlo, y si, seguro.

Que te echaran de casa por romper una planta, que tu padre nunca tuviera tiempo para dedicarte de tan ocupado como estaba trabajando, que te vieras solo todo el dia mes tras mes. Tantas horas muertas solo te llevaron a tener ideas contraproducentes, como aquella de hacer un brebaje con una flor y terminar intoxicado. Ese fue tu salto al vacío, los demás pasos llegaron por su propio peso. La maría, la coca, la cárcel.

Encerrado ya no parecías tan seguro de vos mismo, era un lugar horrible que olía muy mal en donde desentonabas clarísimamente. De nada servía llorar pidiendo que te sacaran, cumpliste un año y te soltaron. Pero al poco tiempo ya estabas otra vez en las andadas.

Fue por esa época que deje de frecuentarte, decidí que ya no podía tenerte en mi vida, que eras potencialmente nocivo y había llegado el momento de separar nuestros caminos. Cuando te lo dije te enojaste, éramos amigos desde mucho tiempo atrás, nos conocíamos. Te abrace por última vez y lloramos por aquella niñez perdida donde supimos ser tan felices.




viernes, 24 de febrero de 2012

Todo sigue igual.


La novedad es que ahora quien quiera colaborar conmigo puede hacerlo pero no está obligado de ninguna manera. Todo lo que escriba se puede leer gratis, se puede copiar y usar de cualquier manera y con el soporte que mejor les parezca en uso o por inventar. Tiene un porque muy claro: para poder estar sentado frente al ordenador escribiendo tengo que tener ingresos. Pero que esto no se malinterprete: pueden seguir leyendo sin hacer ningún aporte económico.

Personalmente me propongo seguir con esto contra viento y marea. En el peor de los casos colgare algo una vez al año, dependerá del tiempo disponible para escribir que tenga o pueda hacerme.

Ideas y ganas hay de sobra. También cuento con la ayuda de algunos amigos que me asesoran, aconsejan y orientan, porque quiera o no para mí esto es absolutamente nuevo, como cualquier recién llegado me equivoco y para eso están estos amigos: para ayudarme a hacerlo lo menos posible.

Todos sabemos que los comienzos son áridos, difíciles, plagados de obstáculos y sabemos de gente que consiguió triunfar, así que posible es, solo es cuestión de echarle ganas, muchas ganas.

jueves, 23 de febrero de 2012

Capitulo 1. Últimos preparativos.


Los viajes eternos no ayudan a mantenerse en forma, toca ser creativo para conseguirlo, correr por los pasillos de la nave ayudan, tengo una cinta pero me gusta más la sensación de correr que da eso, correr. Hace rato que OP, mi Cerebro, me llama y va siendo hora de responderle.

Podría usar la función telepática, pero eso le da mucho poder a OP, y a mí me gusta tenerle en vilo. De solo considerar que si me rio pensando que le llamo Ordenador Personal, OP, sabrá que le tomo el pelo, me entra la risa tonta y forcejeo conmigo mismo para no sucumbir en el puro disfrute. Se ofendería de calibrar lo hondo del insulto.  Aunque dudo que pueda hacerlo.Acudo al centro de mando de la nave y OP me pone al dia con las novedades: en unas horas estaremos orbitando el planeta de destino. Hay que ultimar los preparativos para analizarlo a fondo, la primera salida siempre la hace el Explorador en un vehículo todo terreno. Antes de salir se harán los análisis de la atmosfera y se medirá la radiación, de estos valores dependerá seguir un protocolo u otro.   En los planetas nuevos se evalúa que conviene más si dedicarlo a estar habitado o a ser explotados sus recursos, esa es en parte nuestra misión, dado que somos los que primeramente  observamos in situ las posibilidades de un planeta nuevo. Revise el vehículo con el que bajaría, especialmente el armamento, aunque ya sabía que en según qué situaciones no era suficiente con lo que llevábamos. Nunca estaba de mas hacerlo, me hacía sentir seguro. Repase todo el vehículo, cambie una de las ruedas porque le note desgaste y verifique las luces normales y las infrarrojas. El todo terreno estaba en perfectas condiciones de uso. Las mediciones dieron un planeta estándar que no requería traje protector, eso siempre era una ventaja, eran muy calurosos y  te sacaban mucha movilidad. Para OP bajar con el vehículo era innecesario, dadas las mediciones, pero yo me mantuve firme en bajar con él o  no bajaba. No tenía ganas de llevarme ninguna sorpresa a pie solo en un planeta inexplorado, se pusiera OP como se pusiera. Si resultaba un paseo por el parque le aguantaría pero en caso contrario tendría un refugio donde protegerme de lo que fuera que me encontrara fuera de la nave.      Aterrizamos en una explanada bastante idónea y con todo preparado salí a investigar el nuevo planeta.




miércoles, 22 de febrero de 2012

Traspaso.




Van a hacer doce años ya desde aquella mañana en que me vendió un bocadillo cuando nadie en el barrio me quiso hacer uno. Cansada de madrugar y de lidiar con una normativa obsoleta en cuanto a horarios sumada a la incertidumbre de que va a pasar con esa zona del barrio la han hecho decantarse por traspasar e intentar una nueva aventura en otro ramo comercial.

Con el paso del tiempo me mude bastante lejos de su Bar pero seguí acercándome siempre que podía, cuando era complicado entre semana me dejaba ver los sábados. Siempre la encontraba con una sonrisa, con alegría, con educación y paciencia.

Es como tantas otras cosas que van cambiando, y tenes que alegrarte por los demás, porque es un cambio para mejorar, no solo la parte económica sino tener mejor vida, madrugar bastante menos o dejar de hacerlo llanamente, no tener que agarrar el coche, ni aparcarlo y tener libertad para elegir horarios de apertura y cierre. Y dejar de estar a expensas de la administración pública, que viene diciendo que va a reformar ese mercado desde hace añares y nunca se termina de concretar. Tampoco está claro adonde los trasladarían mientras durasen las obras, ni las posteriores condiciones para permanecer en el mercado una vez remodelado.

Su sumo todo para decidirla a traspasar. En estos días me lo dijo, la vi contenta entusiasmada, ilusionada con el nuevo proyecto y me alegre mucho, es muy trabajadora y estará bien asesorada así que creo que no tendrá problemas para sacar a su nuevo proyecto adelante.

El problema lo tengo yo que debo encontrar otro Bar donde sentirme como en casa.

¡Gracias Pilar! Por aquel bocadillo, por todos estos años, por tantas horas de charla o de compañía silenciosa. Ya te estoy extrañando. Gracias.

Las ganas.


Lo son todo en la vida. En la actividad que sea, hagas lo que hagas, sin ganas probablemente no triunfes. Probablemente no, seguramente no triunfes.

Hay distintos triunfos, hoy me referiré a uno individual, propio, al objetivo personal, ni siquiera meta, solo algo que quiero conseguir porque me interesa y para eso persevero, le pongo ganas, le echo horas.

Un compañero que empezó tarde con el Judo se machaca con las caídas, él solo, sin que nadie se lo diga, igual que si yo estuviera en el tatami, porque yo se lo indicaría. Solo las hace, clase tras clase, buscando mejorarlas, sentirse seguro, dominarlas. Y resulta un ejemplo. De ganas de mejorar y hacerlo cada dia mejor. De cómo si te lo propones la mejoría llega, si trabajas suele ocurrir que mejoras.

Otra cosa a destacar es que lo hace en soledad, en un rinconcito, para no molestar a los demás. Hay más gente necesitada de mejorar sus caídas u otras técnicas, pero que no tiene las ganas necesarias para ponerse a ello. Querrían mejorar pero no están dispuestos a hacer los esfuerzos necesarios para conseguirlo, les falta ganas.

Cuando me dijeron quien era me sonreí, porque le sé muy capaz de hacer eso y más. Le sobran ganas, voluntad y empeño. Ha mejorado muchísimo, aprende rápido y constantemente. Tiene la actitud correcta.

martes, 21 de febrero de 2012

La Naranja.


El viento revolvía la larga cabellera del niño mientras este se paseaba de un lado a otro de la calle, hurgando entre los desperdicios en una búsqueda desesperada de comida. A pesar de los harapos que vestía no se le veía desanimado, signo evidente, de que iba ganando la lucha diaria por llevarse algo a la boca.

Chocaba el contraste formado entre el niño y la calle por donde caminaba: buenos edificios, modernos, confortables y con portero, nada amable en su trato con los niños que obtenían su alimento pidiendo, revolviendo lo que otros desechaban o simplemente robando. Contribuían a formar el contraste: el abrigo de la mujer que con cara de asco, observaba como el niño sonreía al encontrar una naranja semipodrida y los coches, modelos delirantes de conductores que no conocían ni el frio ni el hambre; cuyos precios equivalían a la comida que este niño consumiría en toda su vida y aun sobraría algo para vestirlo más eficazmente contra el frio.

El niño observaba extasiado una caja de naranjas grandes que estaban debidamente protegidas detrás de una reja, junto a peras, manzanas, bananas, ciruelas y gran cantidad de otros vegetales, a cuál de todos más apetitoso. Chupaba su naranja, sin dejar de escudriñar la reja que le impedía llegar a tan preciado botín. Con mirada experta analizo cada agujero, cada camino posible que lo acercase lo suficiente como para llegar con su brazo a las exquisitas frutas tan bellamente expuestas, pero el mismo no existía y como si la reja no bastase, estaba el mastín ,quien ya había hincado sus colmillos en su cuerpo.

Cansado de un espectáculo hermoso pero un tanto irreal, continúo su vagabundeo. Corrió un papel que el viento llevaba dando vueltas quedando clavado frente a los cristales blindados del restaurante, sus ojos picaros recorrieron el interior mientras su aliento dibujaba arabescos extraños sobre el cristal.

Como otras tantas veces anteriormente jugo a descubrir que traía el mozo en su bandeja o se esforzaba por ver que comía el gordo que ocupaba siempre la misma mesa. El mozo llego empujando un carrito hasta la mesa junto al ventanal, esa justo al lado del macizo de flores, donde la niña esperaba con sus padres; levanto la tapa de la fuente dejando apreciar un pavo maravilloso, al que troceo con movimientos expertos y lo sirvió de igual forma.

La niña agarro un muslo y deslizo la mano bajo la mesa situando la presa al alcance del perrito que allí estaba.

Fue un alarido de bestia herida, en el latía todo el odio y la soledad de varias generaciones de niños criados en nuestras calles.


17/6/92

Sobre el arbitraje.


Creo que se ha puesto tan enmarañado el tema que no es fácil para nadie hacerlo bien. Para los árbitros nunca lo había sido pero ahora es peor. Los competidores también lo tienen mal porque van al límite y en ocasiones lo rozan y son penalizados.

Pero a mí me preocupa otra cosa: como en clase hemos dejado de practicar un montón de agarres y técnicas, unas por estar prohibidas directamente y otras por las dudas. Normalmente cuando un agarre o una técnica se prohíben en competición se termina por abandonar y solo queda para los exámenes. Es una medida lógica pues no queremos que quienes compiten aprendan cosas que están prohibidas, pero por otra parte esas técnicas son de Judo o lo eran y de seguir así nos quedaremos con cuatro técnicas y dos agarres. Es frustrante para los más veteranos ver que muchas cosas ya no son validas y que no podes hacerlas. Para la gente nueva no es problema, dado que es la realidad que están conociendo no echan de menos otra cosa.

Pero el nivel en general baja, se ve menos Judo, muchísimo menos que hace unos años. El nivel técnico ha caído en picado, por lo menos esa es mi percepción, y en gran parte es achacable a las reglas que hoy rigen en la competición. Lo estamos haciendo menos divertido, primero para nosotros mismos y después para los demás. Y lo peor es que no se me ocurre ninguna solución, nada que pueda revertir esta situación, es mas creo que ira empeorando paulatinamente.

Creo que hay que ser valientes y tomar medidas para evitar que sigamos por este camino que parece evidente que no es el bueno. Tenemos que volver a ver Ippones y a las gradas levantarse y aplaudir, devolverle la emoción a un combate de Judo, tenemos que hacer lo necesario para que eso ocurra.

Y de paso en las clases ver a los Judokas divertirse más, verles hacer más Judo.



lunes, 20 de febrero de 2012

Somos muchos.


Hay montones de personas que escriben y un porcentaje altísimo de estas quiere editar su obra. Basta con darse una vuelta por la red, queda claro en seguida. Incluso ya los hay que han creado editoriales en principio para sí mismos y en segundo término para terceros, así de adelantados van.

Los que se han auto editado también aparecen, porque hay varias maneras de publicar un libro. Jamás lo habría imaginado, que fuésemos tantos los que escribíamos, descubrirlo ha sido lindo, porque mas allá de la competencia que eso supone está el hecho de que entre tanta cabeza pensando tiene que salir algún libro maravilloso.

¿Me pregunto si esto fue siempre así, si tantas personas soñaban con escribir y publicar y mientras tanto escribían y escribían, adonde estarán esas obras? En un cajón guardadas, olvidadas en un altillo o comidas por los ratones en una estantería del sótano; dormitando en disquetes, cds, o discos duros. No tengo manera de saberlo, pero imagino que será mucho material, espero que los que todavía puedan hacerlo se lancen y lo intenten, regálenle al mundo lo que han escrito.

Yo ya empecé: Esquinas fue escrito el 19/6/92

domingo, 19 de febrero de 2012

Surfeando.




Dando vueltas por la red, de un lado al otro, descubro que hay gente con ganas de hacer cosas a pesar de…..que llevan mucho tiempo intentándolo, algunos están más cerca que otros de conseguirlo, incluso hay quien consigue vivir y ganar dinero a espuertas y lo pierde todo igual de rápido, no diré fácil porque no parece que lo sea.

Y verlo, constatarlo ayuda a seguir dándole forma a mi asunto propio. Ver como lo han hecho, sus formas de promocionarse, que les da impulso, pero sobre todo ver que el fuego sagrado es el motor, eso es lo que te llevara al final, a la meta.

Escribir y vivir de hacerlo ha sido siempre mi idea de trabajo ideal. Siempre viéndola como algo quimérico, como algo que estaba bien como sueño, pero que era absolutamente inviable para sostenerme económicamente. Tengo otros sueños, pero son secundarios, servirían de adorno.

¿Quién pagaría por leerme? ¿A quién le gustaría leerme? ¿A quién le gustara lo que escriba? Hay más interrogantes, empezare con estas y las demás las iré desgranando poco a poco. Voy a seguir escribiendo acá para que ustedes me lean y después comenten lo que les pareció, así iré viendo que les gusta y que no. Lo que no guste podrá esperar o pasar a una sección independiente, porque por ahí me gusta a mí, jajajajajajajajajaj.

De solo pensar que: Un Oficio Duro pudo no ver la luz nunca me revitalizo. Les ha encantado a cada mujer que lo leyó, y a las madres más todavía. Fue a concursar y no salió ni en las menciones, espero que el ganador haya escrito algo mejor o por lo menos igual.

Que el camino será áspero, duro y tendrá mil complicaciones está claro, que me dejare la piel intentándolo lo tengo yo claro, es simplemente lo que quiero hacer.

Gaucho y Negro


Se dice que en su vida hay lagunas, grandes periodos de la misma en los que no se sabe que hizo, ni donde, ni acompañado por quien o quienes. Muchas especulaciones, de todos los colores, muy eruditas y respaldadas por documentación que solo unos pocos pueden ver. Llevo años queriendo escribir una versión libre, extremadamente libre de este hombre, al que llamare Gaucho. Tenía un compañero, muchos hablan de esclavo, pero yo sé que no pudo ser esa la relación que hubo entre ellos, al que llamare Negro. Y antes de seguir y que empiecen las bobadas, yo soy Blanquito para varios Negros retintos, hoy, acá, en Valencia. Cuando hay respeto hasta un insulto es piropo, claro que no cualquiera puede hacer eso, ahí estriba esta verdad.     Seguimos con la historia, que me distraigo fácil, les decía que se ignora a que se dedico durante bastantes años, pues está clarísimo: se dedico a contrabandear ganado hacia el actual Brasil entonces imperio Portugués. Pero antes tuvo que aprender a domar un caballo, jinete consumado, siempre bien montado es evidente que sabia amansar a un crudo. Debió ser de las primeras cosas que aprendió a hacer entre todas las tareas propias del manejo del ganado criado a campo abierto. Cuerear, arreglar  una garras rotas, hacerse unas botas de potro, tropear una punta de ganado con poca o ninguna ayuda, y todo lo demás. A destacar el uso del lazo y las boleadoras.

Negro y Gaucho se conocieron en algún momento de esos años y se hicieron amigos, probablemente en las largas tardes llenas de soledad y en las no menos largas noches donde sobra el tiempo para conversar de lo que se quiera.   O mientras acaricias a un potro sacándole las cosquillas o para que simplemente acepte la mano que le toca, aprenda a confiar en esta y hasta descubra que en algunos puntos le gusta ser rascado; o mateando y haciendo algún retobado, o cualquier garra que les viniera en gana o planeando como hacerse con otra punta de ganado, donde y cuando iniciar el acoso, quien ayudaría, a quien pagarían tributo, esas cosas. En esos parajes vivían una personas muy temidas, los Charrúas, irreductibles y temidos por todos en aquellas tierras,  sus verdaderos dueños antes de la llegada del hombre blanco.       No solían ser amigos de nadie pero se entendían con Gaucho y le permitían vivir en las tierras controladas por ellos. Gaucho debió tener dotes de negociador muy desarrolladlas desde muy temprana edad porque conseguía lo que nadie, además contaba con el Negro un amigo leal, que lo demostraría a lo largo de décadas. Fueron años donde el niño se hizo hombre y género lealtades profundas, tanto que cuesta explicarlas y entenderlas en el marco histórico donde se dieron y entre quienes se produjeron. Porque años más tarde su guardia de corps eran los Charrúas y acá si que todo se vuelve espeso.

Hizo cosas increíbles por el simple hecho de pensarlas, Instrucciones del año 1813, lean ese documento y sorpréndanse. Llego al poder y no se enquisto, siguió siendo el mismo hombre seguido y querido por las mismas personas: los más pobres y desposeídos.                                   En la Redota, el Éxodo del Pueblo Oriental, le siguió prácticamente todo habitante del territorio,  no había wsap, sms, fax, teléfono y dudo que tuvieran palomas mensajeras, así y todo logro que se le uniera la gente masivamente. De esas  épocas ya hay cartas y documentos, descripciones de viajeros foráneos que le visitaron, resulta mucho más fácil seguir su periplo vital.

Sus frases son lapidarias: "La causa de los pueblos no admite la menor demora"

  • "Que los más infelices sean los más privilegiados"
  • "Nada podemos esperar si no es de nosotros mismos"
  • "Con libertad ni ofendo ni temo"
  • "Sean los orientales tan ilustrados como valientes"
  • "Tiemblen los tiranos de haber exitado nuestro enojo"
  • "El depotismo militar será precisamente aniquilado con trabas constitucionales que aseguren inviolable la soberanía de los pueblos"
  • "La cuestión es solo entre la libertad y el depotismo"
  • "Todas las provincias tienen igual dignidad e iguales derechos"
  • "Que los indios en sus pueblos se gobiernen por sí"
  • "Para mi no hay nada más sagrado que la voluntad de los pueblos"
  • "En lo sucesivo solo se vea entre nosotros una gran familia"
  • "Yo no soy vendible, ni quiero más premio por mi empeño que ver libre mi nación"
  • "No venderé el rico patrimonio de los orientales al vil precio de la necesidad"
  • "Que en modo solemne se exprese la voluntad de los pueblos en sus gobernantes"
  • "El pueblo es soberano y él sabrá investigar las operaciones de sus representantes"
  • "Mi autoridad emana de vosotros y ella cesa ante vuestra presencia soberana"
  • "Unidos intimamente, luchamos contra tiranos que intentan profanar nuestros más sagrados derechos"
  • "Los pueblos de la América del Sur están intimamente unidos por vínculos de naturaleza e intereses recíprocos"
  • "No existe un pacto expreso que deposite en otro pueblo de la federación la administración de la soberanía"

·         guifont@chasque.apc.org

·         Montevideo Uruguay.

 Cuando se vio sin respaldo de las demás autoridades se exilio junto con su amigo, en lo más profundo de la selva Paraguaya donde murió en el ostracismo.

Fue único en muchas cosas, la que más destaca es la vigencia de sus ideas.

Y seguro que él le decía Negro  a su amigo.



Las frases están sacadas de un artículo del que deje el enlace al acabar las mismas.

http://urumelb.tripod.com/historia/artigas_refranes_frases.htm. Acá encontraran más frases y refranes del Gaucho y su amigo Negro.

jueves, 16 de febrero de 2012

Esquinas.




Noche a noche están allí,  llueva o brillen las estrellas, aun cuando las bajas temperaturas nos obligan a todos a cargar con varias capas de ropa debajo del abrigo y a caminar rápidamente para llegar a casa y sentarnos arriba de la estufa.

Siempre en el mismo sitio, esa parte de la ciudad es su sinónimo, si pasamos y no están, nos preguntamos que habrá pasado; ni que hablar si se repite la ausencia al otro dia o si no las volvemos a ver donde solíamos.

Se exponen a muchas cosas, ninguna de ella agradable y carecen de defensa ante las injusticias que suelen acosarlas en el transcurso de sus vidas.

Aparentemente existen desde muchísimo tiempo atrás, cuasi desde que el hombre ha comenzado a vivir en grandes grupos y en todo el orden social, con diferencias importantes pero compartiendo alguna cosas, entre ellas: tienen precio, se cotizan. Pagando de una forma u otra se obtienen sus servicios, el costo de los mismos esta dado por la oferta y la demanda y dependerá en gran   la edad, la juventud aumenta el precio así como la cultura general, presencia y el dominio de varios idiomas.                                                                                                       Llegan a este oficio siguiendo distintos y variados caminos, asimismo se retiran en circunstancias variadas, siempre que puedan hacerlo.

Como toda profesión tiene riesgos, estos son bastante molestos e incluso pueden llegar a  ser mortales. La sociedad condena a quienes ejercen esta profesión abierta y solapadamente, alternativamente, según las coyunturas que le afectan. Nadie se para a considerar que son seres humanos y no bienes. A casi nadie le preocupa sus desgracias, pocos intentan ayudar en la medida de lo posible.

Tienen hijos, padres, hermanos; son pues como mi mama, la abuela y mi chica y sin embargo son distintas. Todos quien más quien menos las hemos insultado y menospreciado.

La muchacha entra a la habitación, camina hasta la cama, se desviste con cierta torpeza, se tiende sobre la cama y separa las piernas; el hombre  se abalanza sobre ella tan cegado por la prisa que le acomete que no advierte las lagrimas. Por otra parte: ¿A quién le importa? ¿No ha pagado? ¿No está con una puta?

martes, 14 de febrero de 2012

Paciencia.


Es la palabra clave, como bien me recordaba un amigo, para esta etapa de mi vida. Porque se supone que volveré a hacer todo lo que hacía y para empezar no me veo entrenando dada la flojera general que sufro, mucho menos me veo aguantando el ritmo a los jóvenes de la clase. También me cuesta horrores quedarme quieto y concentrarme, leer es casi imposible y escribir me supone un gran esfuerzo. No quieran verme intentando escribir a mano, patético. En el teclado los dedos van por donde quieren, en un baile propio al que soy ajeno.

Estar quieto esperando a alguien me supera, se me hace cuesta arriba por completo.

Y en cuanto al  trabajo. Me pregunto que seré capaz de hacer, y va en serio, porque no me veo haciendo algunas cosas que antaño hice. Curiosamente no me preocupa como antes.                        Paciencia dice mi amigo. Y lo dice mucha más gente. Y lo convierto en mi oración particular:”Paciencia, paciencia, paciencia”.

Nunca tuve mucha, la verdad,  me parece que tendré que aprender a tenerla. Sobre todo conmigo mismo, sobredosis de Paciencia.

lunes, 13 de febrero de 2012

Cristian, el desenlace.


¡Si, lo ha conseguido, aprobó el curso! Verle orgulloso es suficiente, enterarme de que todos los cachorros lo consiguieron fue maravilloso, todo el curso lo consiguió menos uno. No está nada mal, nada mal.

Había detalles en Cristian que mostraban que sería fácil enseñarle cualquier cosa, como que asumía la responsabilidad que le tocaba sobre todo cuando las cosas se torcían, que al no ver levantase la pantalla y se quemase lo ojos por primera vez, ese tipo de detalles.  Pero era evidente que no se sentía capaz o preparado, aun así le ponía empeño, otro detalle interesante.                                 Según cuenta un mutante de nivel diez, el empezó igual: quemándose los ojos intentando ver mejor lo que soldaba.

Lo que es sorprendente es que haya conseguido aprender la teoría también sin mayores dificultades, porque entre que no veía la pizarra y le parecía chino, al principio no parecía que fuera a ser posible. Se esforzó y con la ayuda de la Profesora consiguió desentrañar los misterios de eso que para él era chino.  Tuvo que estudiar en casa mucho, sentarse y pasar largas horas aprendiéndose la teoría. También tuvo que perderse descansos en los que se ponía en manos de la Profesora para repasar y despejar dudas. Tuvo que trabajar y esforzarse mucho, cosa que hizo porque quería aprobar el curso.

Porque en la parte practica iba más suelto, no le resultaba tan difícil, aunque también conto con el apoyo del Profesor y algún compañero que siempre estaba dispuesto a ayudar. Los problemas en el aula de prácticas eran menos complicados de resolver y si encima aplicaba la teoría las cosas se ponían más fáciles. Lo más difícil era cuando una maquina decidía trabajar por su cuenta, para configurarla otra vez correctamente se pasaban unos buenos tres cuartos de hora.    

Es joven y puede seguir formándose en el mundo de la Soldadura. Como ya sabe que puede, lo tendrá más fácil que hasta ahora.

domingo, 12 de febrero de 2012

Exploradores.



Cuando La Tierra, planeta primario desde donde los Humanos se lanzaron al Universo, dio muestras inequívocas de haber alcanzado su punto de saturación, fue necesario descubrir otros planetas que pudieran sustentar a los Humanos. Los Automatismos por si solos no fueron capaces, no lo son actualmente, de llevar a cabo la tarea,  por lo que se creó nuestro Cuerpo de Exploradores. La Inteligencia Artificial, no puede suplir el Instinto de un Humano, como quedo demostrado a lo largo de muchos fracasos. El binomio conformado por un Cerebro, evolución de los obsoletos Ordenadores, y un Explorador ha demostrado ser más efectivo y seguro.

Los Exploradores no somos Voluntarios; el Cuerpo se nutre de los hijos primogénitos  de otro Explorador, estos no pueden elegir, sus hermanos, en caso de tenerlos si que pueden optar libremente.  También se mantiene vigente el viejo método, consistente en aceptar Condenados a Muerte, Delincuentes Peligrosos o a cualquier Ciudadano que sea propuesto y pase las pruebas de Admisión. Nadie se ofrece para este servicio.

Solamente en el caso de ser hijo de un Explorador puedes retirarte del servicio activo en el lugar que elijas y puedas costearte. Tienes que haber servido quince años mínimos y tu solicitud ser aceptada por tus Superiores.                                                                                                              Los demás, si  llegan a la edad de jubilarse, son destinados a un Planeta en fase de Transformación.

sábado, 11 de febrero de 2012

Amigos.


Hoy he tenido un chat largo con una querida amiga, de la que solo diré que vive en Brasil, no hace falta más.

Está preocupada por mí, igual que todos mis amigos y amigas. Muy preocupada.

Algo fallaba en la conexión y cortamos la sesión, dejándola emplazada para otro dia. Solo que al momento de cerrar el dichoso chat que no quería funcionar como debe, me puse a escribir estas líneas. Hace mucho tiempo que nos conocemos, más de veinte años, es de la Guardia Vieja, y note que no le tranquilice. Suponiendo que los demás estén igual amplio el objetivo y hare de cuenta que fue un chat simultaneo con todos y cada uno de mís amigos y amigas.

Para empezar: sufro un Trastorno Bipolar. Recién diagnosticado, a raíz de una crisis, ahora estoy con medicación que se irá ajustando a medida que pase el tiempo. Ya baje a cinco pastillitas diarias, pero eran un montón mas hace una semana. A mi favor: no soy consumidor de ninguna droga. Además como no suelo medicarme para nada respondo bien a cualquier tratamiento.

Seguro que después de leer un poco sobre TB (Trastorno Bipolar) todos están más tranquilos, porque me reconocen, e incluso reconocerán a  alguien más (No le digan nada o díganselo o denle un folleto); esto quiere decir que soy el de siempre pero diagnosticado y por lo tanto recibiendo ayuda. ¿Quiere decir que seré distinto a partir de ahora? Ni la más remota idea, de corazón, no lo sé. Espero en todo caso ser mejor persona, seguir siendo amigo de mis amigos y poder reventar a mis enemigos, si los tuviese. Siempre la incertidumbre como única certeza.

Ahora mismo no me dejan manejar, voy un poco  moderando con los reflejos y con flojera general a nivel muscular. A Judo no puedo volver en estas condiciones, en serio, estoy muy flojo. Así que esperare un poco, aunque mantengo el objetivo de sacar el titulo de Monitor en la próxima convocatoria.  Probablemente vaya un poco a nadar por hacer algo e intentar no subir mucho de peso.

Cualquier otra cosa ha quedado estacionada a un costado del camino. Mi viejo viene a verme, todavía no hay fecha pero ya tiene el Pasaporte y todos los papeles que le pedían para dejarle venir.                                                                                                                                                                

También quería escribir porque fue muy tierno leer a mi amiga intentando animarme, subirme la autoestima. Doble ternura porque otra amiga también insiste mucho sobre el tema. Y la tengo alta, como siempre. No es un problema de baja autoestima cuando despotrico por los trabajos que he tenido. No lo he pasado peor que otros tantos, ni me han usado más que a los demás, puede que yo lo verbalice más que el resto. Es fascinante escuchar a los Empresarios quejarse sistemáticamente de la apatía de los empleados y ver como revientan al que no es apático, por las dudas, vio; no vaya a ser cosa que sea un buen empleado y encima sepa más que mi hijo, sobrino, o enchufado de turno. O aprenda más rápido y mejor.

Me puso al dia con su vida, sus hijos, su marido, sus negocios; en un pareo rápido de cómo va la vida de alguien que está lejos y no vemos hace años, como pasa con muchos de ustedes. Porque da igual si eres mi amigo o no, seguro tenes amigos y amigas que viven lejos y no ves hace años. Nos reímos con cosas que me recomendó y con mis respuestas, contare una propuesta: “Rafa hace Yoga, te puede ayudar. El énfasis está en la respiración”. Sé que lo decía en serio pero no pude dejar pasar la ocasión de responderle:” Lo mío es mas respirar y atacar, respirar y atacar”. O por lo menos solía serlo.                                                                           Me conto que una amiga en común le estuvo visitando unos días con su marido y sus hijos, que era como  si no hubieran pasado los años. Pude imaginarlas juntas, tantos años después.

El chat no alcanzo, nunca es suficiente, pero me dejo un calorcito en el Alma, porque fue con ella pero se me disparo el contador de todos ustedes y la emoción fue una ola enorme que me levanto y me hizo sentir bien.

Tengo una familia, tengo amigos, tengo una certeza,  solo falta que algún dia parar la olla no sea tan complicado.

Yo ya soy Rico, desde tiempos inmemoriales: les tengo a ustedes!




viernes, 10 de febrero de 2012

Recaudador de Impuestos.


Nueva ocupación, recién promocionado. Como los ciudadanos son reacios a pagar voluntariamente sus cargas fiscales se ha tenido que volver a la figura del Recaudador. Este debe ir a cada planeta de la confederación y recaudar in situ los impuestos según unas estimaciones que fluctúan de acuerdo al volumen de la exportaciones y a los gastos generados al gobierno federal, normalmente en protección.

Te dan una nave, te adjudican un Cerebro y ya estás listo para salir a trabajar. El primer planeta que debía visitar se dedicaba a explotar la madera, según los registros las cosas les iban bien. Pero en el planeta maderero me dijeron que debido a unas inundaciones imprevistas ese año habían tenido pérdidas muy grandes. Rellene el formulario correspondiente, lo firmo el gobernador local y puse rumbo a otro planeta.

Este se dedicaba a las frutas tropicales, sus productos eran consumidos en todo el universo, pero una plaga muy virulenta le había producido enormes pérdidas. Se veían imposibilitados de pagar ningún impuesto incluso preveían pedir ayudas Federales. Rellene el formulario que fue firmado y puse rumbo a un planeta dedicado a los combustibles fósiles.

Se notaba que prosperaban en cada detalle, las naves eran todas nuevas, las casas suntuosas pero no querían pagar, consideraban que trabajaban duro como para tener que pagar impuestos. Este formulario no existía, hice uno que nadie firmo.                                                                     Pensaba que las cosas no me iban bien, no recaudaba impuestos en ningún planeta pero seguía visitándolos según la ruta que Cerebro tenía programada. Incluso quede varado en un planeta remoto, con la nave muy averiada y tuve que esperar a un transporte de mercancías que me acerco a las oficinas centrales del Gobierno Federal.

-Díganos ¿como le fue recaudador?-Mi jefe parecía enojado.

-No recaude nada, señor.-Ni le mire a la cara de tanta vergüenza.

-¿Cómo es posible eso? Tenía una ruta asignada, en todos los planetas había impuestos que recaudar, no lo entiendo.-Estaba perplejo, y asombrado.

-En la mayoría habían tenido un problema que les había afectado la producción, en uno se negaron terminantemente a pagar.-Explique los hechos.

-¿Y usted en cuanto se ha enriquecido jovencito? ¿Donde tiene los créditos?-

-No, no tengo ningún crédito, gaste mi salario intentando reparar la nave, pero esta estaba demasiado estropeada para ser reparada. -Había gastado todos mis ahorros intentando salvar aquella nave.

-Puede esperar afuera, como algo, descanse, tenemos que deliberar.-

Salí a la zona de descanso, comí, me duche y me acosté a dormir, estaba muy cansado. Entretanto mis jefes deliberaban sobre mi situación, que aparentemente era mucho mejor de lo previsto. Lo que no sabía era que por norma general los Recaudadores de Impuestos se enriquecían a costa de conchabarse con los gobernadores locales o porque se quedaban parte de los impuestos recaudados, no los declaraban. Yo había evitado ambas situaciones, más que nada por desconocimiento, me habría encantado ser uno más, no destacar, no llamar la atención. Claro que ahora toda esa atención estaba enfocada en mi persona.                                  Otra ducha después de dormir me dejo como nuevo, aproveche para acercarme al hangar y admirar las naves que ahí atracaban. El movimiento era abrumador, todas las plataformas tenían tráfico intenso, lo que resultaba lógico, fui incapaz de discernir cómo funcionaba el código de colores.

En mi alojamiento me esperaba un Cerebro nuevo, debía volver a todos los planetas que ya visitara y no solo recaudar los impuestos pertinentes sino que debería cobrarles un recargo del treinta por ciento. Contaría con una nave nueva y un respaldo de dos naves militares como respaldo y muestra de autoridad.

En todos los planetas pusieron mil objeciones pero pagaron exactamente la cantidad estipulada, no tanto por mi presencia como por la de mi escolta, dos naves militares eran mucha capacidad disuasoria. Regrese a las oficinas centrales del Gobierno Federal donde me asignaron otros cuadrantes para visitar. Ahora mismo viajo en dirección al 729, la mayoría de los planetas de ese cuadrante se dedican a la producción de carne. Según Cerebro son planetas fáciles en el asunto de los impuestos, aun así conservo mi escolta.

jueves, 9 de febrero de 2012

Cazar




Desde muy chico salir a caminar buscando cazar algo me gustaba. Empecé con una honda que daba risa a cualquier posible víctima, con el tiempo subí a una Chumbera y con los años a un rifle calibre 22 largo. Un Baikal, modelo Toz. Para ese tiempo ya no daba risa a las presas entre otras cosas porque había a aprendido a conocer las costumbres de cada animal que podía enfilar con la mira. Ese es el primer paso para que alguien se convierta en un cazador de éxito. Y en segundo lugar porque se me daba bien la puntería con el rifle.

Con Trece años mi tío me llevo a la primera cacería y si bien yo no tenía más que una Chumbera se me explico que en el campamento y en un radio de quinientos metros alrededor de este, las armas debían estar descargadas. Infringir la norma implicaba el decomiso del arma y la prohibición expresa de volver a ningún otro campamento futuro. Norma estricta que jamás ha sido violada, aun se espera al valiente o al más nabo que lo haga.

Salí a patear el campo con mi Chumbera, llevaba un buen rato meta pata con el campamento siempre en el horizonte, no era cuestión de perderse en la primera salida, lo tildaran a uno de chambón y le quedase la cruz para la eternidad. Pegaba la vuelta frustrado cuando un bicho salió espantado de entre unas matas y se metió en una cueva. Empecé a pegar unos alaridos barbaros que atrajeron a toda la tropa a la carrera, los más veteranos llegaban jadeando, todos opinaban que yarará seguro, me tiraron al suelo, me revisaron las piernas y los brazos, buscaron a la culpable entre el yuyal, pero nada. Ni víbora ni mordida ni nada. Ahí atine a señalar la cuevita, y a mencionar que un bicho estaba adentro. Sacar el pichón de Mulita les llevo menos de cinco minutos, casi me muelen a palos por nabo, y amenazaron a mi tío con deportarme si persistía en esa actitud. O dejaba de ser un Montevideano salame o me mandaban pa la ciudad, incluso había voluntarios para el trabajo. A más de uno le hacía falta arrimarse a un mostrador y yo venía como excusa perfecta.

Anduve de orejas gachas unos días, sentía las miradas en mi espalda, deje hasta la Chumbera en custodia, no tenía ganas de nada. Probé pescar pero infructuosamente, no saque ni una miserable mojarra. Para despejarme un poco pedí que me cruzaran al otro lado del rio, según comentaban había una lagunita que podía dar buena pesca. Tampoco había nada que se agarrara al anzuelo y decidí volver al campamento con tan buena liga que me comieron los mosquitos.

Tan afectado me vieron que me prestaron un rifle calibre 22 largo. ¡Menudo chiche! Un Berno modelo 2, que mantenía la mira como el primer dia: daba justito donde apuntabas. Claro que, rifle tenia, pero ni perro ni nada más. Seguramente se estaban muriendo de la risa ante la perspectiva de que llenara el monte y los campos de plomo y no agarrase nada.Ante situación tan fulera descarte a los Carpinchos, fui honesto y considere que no estaba a la altura de semejante presa, me quede con palomas, perdices y liebres. Y tome la determinación de no volver al campamento sin haber cazado algo, cosa que cumplí invariablemente. La olla engordaba con mis presas, poca cosa, pero conseguidas con esfuerzo: miras abiertas, sin perro y desconocimiento del lugar. Fueron días barbaros, disfrute mucho, tanto que sigo cazando de igual forma: miras abiertas, sin perro y con rifle y bala. Suelo volver casi siempre sin nada al campamento pero considero que es una manera de igualar las cosas con los animales, lo que de verdad importa es la caminata, acecharles y según en que ocasiones ignorarles, no verles, no dispararles.

Supongo que el paso próximo será una cámara, capturar el momento dejando vivo al animal.

martes, 7 de febrero de 2012

Port Saplaya



Al poco tiempo de vivir en Valencia, estuve trabajando en un lugar cercano llamado Port Saplaya. En coche no llega  a diez minutos de viaje, pero yo lo hacía en bicicleta. Por la mañana, a eso de las diez era relativamente sencillo llegar, pero el regreso a las dos o tres de la mañana la cosa se ponía fulera.

Y era así porque acampan en la zona unas familias Gitanas en caravanas, y tienen una perrada de aúpa, no menos de una docena, que iba desde el de aguas pequeñajo al mastín capaz de enfrentar lobos.  Estaban sueltos y campeaban a sus anchas, que eran muchas.

Salir medio reventado de trabajar desde las diez de la mañana y que fueran las tres y saber que te quedaban trescientos metros de puro miedo, y que no había más huevos que pasar por ahí, noche tras noche te hace más duro pero tenes que serlo ya antes de encarar a la perrada, la noche y esas gentes.

Suerte que me crie frente al Roosevelt, y aprendí de chico a torearle al miedo. Claro que aquel parque me hablaba y yo entendía su idioma. Cada ramita, cada hojita sonaba distinto, no es igual el ruido de la rama que barre el suelo por el viento que la que esta caída y se mueve. Las sombras asustan pero nada se puede mover sin delatarse, la hojarasca delata cualquier movimiento por eso la prueba suprema de valor era cruzarlo después de una buena lluvia, ninguna ventaja para la presa, todo a favor del cazador pero nunca me considere una presa fácil y cuando cruzaba el parque por el medio daba por hecho que todos mis conocimientos eran validos para defenderme, no solo los de Judo.
Igual fueron tres meses de miedo nocturno, solo descansaba los lunes, la única noche que no temía caer enredado entre mandíbulas en una zona donde nadie me ayudaría. Deje el trabajo el dia que antes de ir a trabajar me descubrí llorando y ¡todavía faltaba todo el dia por delante

domingo, 5 de febrero de 2012

Una guacha llamada Ainoa


Un amigo me conto una vez una historia que le había pasado, estaba muy afectado al llamarme y no se le había pasado cuando nos juntamos.

Resulta que le habían presentado a una chica, muy mona, que iba con un grupo de gente conocida. Sin saber bien porque una noche en la que todos estaban de farra el  la vio  a un costado sentada mirando la oscuridad y se arrimo con muy malas intenciones, pero le duro poco la genialidad porque la guacha le dijo que se fuera que no le molestara, que sola estaba bien. Según me conto algo le hizo quedarse, y mirar con ella la nada. No miraba el cielo cuajado de estrellas, y alguna que otra estrella fugaz, no, miraba directamente hacia la negrura de la noche. El dejo el galán apartado y se quedo sentado mirando la noche intentando ver lo que ella. No hablaron de nada, sabía que se llamaba Ainoa y fue incapaz de averiguar nada más.

El problema es que no la encontró al otro dia, la busco por los campamentos y no estaba, nadie la había visto pero tampoco nadie le echaba de menos. Incluso le dijeron que no buscara mas, que no la encontraría, que no se había ido pero como si fuera el caso.

Se tuvo que volver, se terminaban sus vacaciones, y dejo el tema hasta que se encontró con uno de los guachos que le habían presentado a Ainoa. Le pregunto por ella y le dijo que aquella noche era la última, que Ainoa había decidido irse, estaba enferma y los médicos no podían ayudarla, así que  se juntaron los amigos de siempre hicieron un campamento de despedida y ahí fue que apareció el, haciéndose el galán.

Ser el último en hablar con ella le tenía afectado, no supo evitar lo evidentemente inevitable y lo llevaba mal, quería contármelo y quería saber también que habría hecho yo en su lugar de haber sabido lo que la muchacha pretendía.

Dejarla ir, sentarme a mirar la negrura de la noche, no decir bobadas, hacerla sentir acompañada, hacer lo que ninguno de sus amigos se animo a hacer. Hacer exactamente lo que hiciste Luis, le dije y pareció quedarse mas tranquilo.

sábado, 4 de febrero de 2012

Rulos Largos




Hubo una época en la que llevaba los rulos largos, hasta los hombros, y por más que los peinara o arreglase no había manera de tenerlos medio ordenados. Tenía en aquella época una yegua Picaza, calzada de una mano, con la que recorría los alrededores de mi casa. El territorio lo delimitaban dos cursos de agua, por un lado el arroyo Carrasco y por el otro el arroyo Pando. Entre ambos unos buenos treinta kilómetros de playa y dunas para recorrer, explorar y disfrutar. También estaba el Parque Franklin Delano Roosevelt, que ignoro qué tan grande es, pero es enorme, bordea el aeropuerto y supongo que decir que tiene unos veinte kilómetros más o menos no es nada  exagerado. Gran parte del mismo en aquella época eran bañados súper divertidos para jugar al escondite a caballo o incluso para perderse y pasar horas buscando la salida.

De aquella época viene la comparación con el Tigre, nunca Gatito, Cazador siempre, nunca presa. Águila no Paloma. Conservo tatuados en la piel, en forma de cicatrices, sendas caídas con montura y todo, en un revolcón de los de época donde te paras de un salto y corres a ver si tu caballo se quebró una pata, generalmente una mano. Comprobada la montura te palpas para saber si estas lastimado, control de daños rápido antes de ir a casa e informar que otra vez estas herido. Conservo en la espalda dos pequeñas y en el hombro derecho una de casi quince centímetros, viejos recuerdos de una edad feliz como pocas.          Junto al costurón de la barriga, primera cicatriz que marco mi piel hacen un conjunto más propio de un Guerrero que de un muchacho del extrarradio.

La mirada Salvaje la tengo desde siempre, es franca y directa, con chispitas de luz cuando es amable y sin luz y negra cuando es amenazadora. Hace tiempo que no la uso, demasiado que la guarde, debo sacarla más seguido, hay gente que confunde educación con miedo, olvide una de las lecciones que más rápido aprendí: la paz del Tigre funciona porque nadie duda que peleara por tenerla. En el pasado compre respeto y pague con sangre, mas veces la mía que la de otros, pero siempre se pago con sangre. Los que estén asustados pueden ir a leer otras cosas, menos violentas, menos reales, más livianas, no hay problema. Después no se lamenten de vivir bajo las garras de los Lobos o Jaurías de Perros.

Me siento un poco otra vez como aquel adolescente. Un poco viejo ya, el doble de edad, peinando canas, con una hija que al escuchar mis travesuras, las que puede escuchar se enfada porque era muy malo papito. Jajajajajajjajajaja, y no le cuento todo lo que no debe oír, pero algún dia le contare, por si algún nieto o nieta mía se me parece en el futuro, así sabrá  a que atenerse. Yo ya me lo imagino y me veo despotricando y pensando después que esperaba con semejante abuelo. Va  a ser movidito el futuro, muy movidito.

Este es un mensaje de respuesta a alguien querido de aquella época, que para mi cumpleaños me hizo acordar de la época en la que cabalgaba desenfrenado por la playa, más cerca de Los Charrúas que de los Criollos, siempre Tigre. Determinado a comerme al mundo o morir intentándolo.

Dos opciones.


En una clase de Judo, hace un par de meses estábamos combatiendo en el suelo. Todas las parejas desparramadas por el tatami, unos trabajando más que otros, muchos hablando sin esforzarse lo mas mínimo. Mi contrincante era de los que se esfuerzan, además ha crecido y se ha puesto fuerte; y lógicamente me atosigaba sin compasión, como debe ser. Incluso consiguio que me rindiera con una estrangulación ejecutada perfectamente, era la primera vez que eso pasaba y estaba exultante. Redoblo esfuerzos al notarme un tanto cansado, pretendía conseguir el doblete, pero no daba ninguna ventaja. Se mantuvo frio, protegía brazos y cuello, no caía en los engaños, ni reaccionaba nunca de la manera deseada, lo ponía difícil. Todos mis ataques neutralizados con solvencia, los suyos tenian muy mala idea, eran consistentes y me obligaban a emplearme a fondo.

Entre risitas y jadeos ninguno cejaba en su empeño: derrotar al otro.

Cuando tuve una ventaja, le prepare dos trampas, opuso resistencia hasta que lo tuve inmovilizado y estrangulado. Se rindió y mientras le soltaba se acabo el tiempo, tocaba cambiar de pareja.

Saludamos y me dice que no tenia salida, que había echo exactamente lo que yo había previsto pero que en ningún caso tenía posibilidades de escapar. Una opción era evidente igual que el desenlace y la otra era igual de mala, disfrazada de oportunidad. Remato: Retorcido, me engañaste y una sonrisa luminosa, llena de regocijo acompaño al codazo. ¡Que abuelito más malvado! Se quedo encantado con las dos opciones que le propuse como salida, una a descartar inmediatamente y la otra para intentar sin dudar; en cualquier caso, terminas rindiéndote sin remedio.

Genial, es genial repetía.

Lo que será realmente genial, será verle a él, preparar y presentarle a otro, las dos opciones. Porque ahí es cuando deja de ser deporte y pasa a ser Arte. A mí me lo hicieron hace eones, décadas mas tarde lo perfeccione y lo solté, quien lo recoja le sumara y lo soltara, cada ciclo esta mejorado, si de por si no hay salida imagínense lo divertido que será dentro de trescientos años presentarle el desafío a otro Judoka.

Generalmente no aprovechamos cuando un Sensei muy viejito anda en la vuelta, y es sorprendente lo que se aprende de ellos, como vivimos tiempos tan acelerados donde el tiempo para los mayores nunca nos aparece, difícilmente sepamos aprovecharles cuando les tengamos a mano.

Otro error común es poner a personas que no están al nivel adecuado con los Viejos Maestros, en la creencia de que les haremos más sabios, y en verdad no es así, además deberían ser Judokas escogidos los que estuviesen cerca del Sensei, única manera de asegurar la trasmisión de los conocimientos.

Viejas ideas, que con el tiempo han dejado de ser utilizadas, pero que no han perdido nada de vigencia.






viernes, 3 de febrero de 2012

Razones de Fuerza Mayor


Por razones de fuerza mayor no he podido escribir, las mismas continúan, de momento he conseguido un ratito de libertad y he aprovechado para publicar algo que ya tenía escrita desde hace tiempo, solo faltaba que mi hermano me diera permiso para nombrarle  y en cuanto eso paso lo tuve listo para publicarlo, me quede corto en trasmitir el sufrimiento que implico ese trabajo ,pero igual sirve para acercarles un poquito al drama diario dehacer aquel trabajo e cindiciones inhumanas.

Las condiciones de fuerza mayor son el echo de star internado en Psiquiatria, de la Fe nueva. Todavia no tengo el alta, aunque este fin de semana me han dejado venir a casa,no puedo manejar por la medicación ni hacer un monton de otras cosas, hasta escribir esto me esta costado un trabajo enorme, meto los dedos mal,  poer que nunca. Darles las gracias a los amigos que han estado llendo a verme, llamando  y estando al tantode la situación. Ya saben entonces que el silencio es por poco tiempo, la semana que viene se supone que me dan el alta.

Gracias a todos por la comprencion  y las muestras de animo.

Volvere, eso es seguro, lo que ya es mas difícil, es establecer cuando.

Un abrazo.